Importancia da Fisioterapia na rehabilitación de pacientes cardiópatas

O Colexio Oficial de Fisioterapeutas de Galicia (CoFiGa) adhírese á Semana do Corazón, que este ano se celebra do 25 de setembro ao 1 de outubro, lembrando a importancia da rehabilitación cardíaca para reducir a morbilidad e a mortalidade asociadas á enfermidade cardiovascular

25 Sep 2017 / Prensa CoFiGa / Sede COFIGA

A abordaxe terapéutica do enfermo cardíaco debe levar a cabo dun modo integral, actuando sobre as esferas física, psicolóxica e sociofamiliar do suxeito e o control dos seus factores de risco. Trátase dun conxunto de actuacións ordenadas no seo dun programa, realizadas por diversos profesionais coa meta principal de procurar a reinserción social do paciente, incrementar a súa calidade de vida e diminuír a súa morbimortalidade.

Os equipos que tratan ao paciente no proceso de Rehabilitación Cardíaca están integrados por fisioterapeutas, dietistas, traballadores sociais, terapeutas ocupacionais e psicólogos, entre outros. Estes equipos multidisciplinares axudan ao paciente para ocupar un lugar o máis adaptado posible, segundo as súas capacidades, na sociedade.

Dentro dos equipos multidisciplinares de Rehabilitación Cardíaca, o papel dos fisioterapeutas céntrase en informar os pacientes dos aspectos relacionados coa enfermidade desde o punto de vista físico e asesorarlles sobre o que pode ser prexudicial para a súa vida, ademais de deseñar, supervisar e coordinador programas de actividade física específicos e adaptados á capacidade de cada paciente e que lle axudan a mellorar as funcións do sistema cardiovascular, musculoesquelético e pulmonar.

Os programas de rehabilitación cardíaca (PRC) efectuados tras o infarto agudo de miocardio (IAM) demostraron a súa eficacia en canto ao incremento na capacidade funcional, o control dos factores de risco coronarios, a redución da sintomatología e a mellora da deterioración psicolóxica. Así mesmo, hai evidencias dos beneficios en canto á súa relación custo-eficacia.

Este tipo de programas iníciase na fase hospitalaria, cando o paciente atópase na Unidade de Coidados Intensivos Cardiolóxicos a consecuencia dun infarto agudo de miocardio, dunha cirurxía ou outro tipo de intervención, a fin de evitar os inconvenientes do repousos prolongado en cama, como son o descenso importante da capacidade funcional por debilidade física, a aparición de complicacións respiratorias e a prevención da formación de tromboembolismos. Nesta etapa inicial, os obxectivos dos programas de rehabilitación cardíaca son: realizar movementos para evitar as limitacións da mobilidade que poden provocar a dor e a cicatrización da ferida durante os primeiros días despois da intervención, así como eliminar secreciones bronquiales mediante técnicas de Fisioterapia Respiratoria, o que axuda tamén a tratar derrames pleurales ou parálise frénicas.

Na fase ambulatoria, de convalecencia, cando o paciente conta co alta hospitalaria e realizou unha proba de esforzo precoz (Pep), os programas de rehabilitación cardíaca permiten recuperar ou mellorar a capacidade funcional da persoa, mellorar os niveis de forza, promover os cambios no estilo de vida, educalo sobre a súa enfermidade e os seus coidados, concientizarlo sobre a importancia dos beneficios do exercicio físico, como así tamén a adherencia aos programas.

A terceira fase é a de mantemento, na que o paciente debe manter os novos hábitos que adquiriu para evitar a aparición doutro evento cardíaco. O paciente estable pode continuar coa súa rehabilitación por conta propia, seguindo as pautas aprendidas e sempre baixo supervisión de médicos e fisioterapeutas.

Importancia de la Fisioterapia en la rehabilitación de pacientes cardiópatas

El Colegio Oficial de Fisioterapeutas de Galicia (CoFiGa) se adhiere a la Semana del Corazón, que este año se celebra del 25 de septiembre al 1 de octubre, recordando la importancia de la rehabilitación cardíaca para reducir la morbilidad y la mortalidad asociadas a la enfermedad cardiovascular.

El abordaje terapéutico del enfermo cardiaco debe llevarse a cabo de un modo integral, actuando sobre las esferas física, psicológica y sociofamiliar del sujeto y el control de sus factores de riesgo. Se trata de un conjunto de actuaciones ordenadas en el seno de un programa, realizadas por diversos profesionales y cuya principal meta es procurar la reinserción social del paciente, incrementar su calidad de vida y disminuir su morbimortalidad.

Los equipos que tratan al paciente en el proceso de Rehabilitación Cardiaca están integrados por fisioterapeutas, dietistas, trabajadores sociales, terapeutas ocupacionales y psicólogos, entre otros. Estos equipos multidisciplinares ayudan al paciente a ocupar un lugar lo más adaptado posible, según sus capacidades, en la sociedad.

Dentro de los equipos multidisciplinares de Rehabilitación Cardiaca, el papel de los fisioterapeutas se centra en informar a los pacientes de los aspectos relacionados con la enfermedad desde el punto de vista físico y asesorarles sobre lo que puede ser perjudicial para su vida, además de diseñar, supervisar y coordinador programas de actividad física específicos y adaptados a la capacidad de cada paciente y que le ayudan a mejorar las funciones del sistema cardiovascular, musculoesquelético y pulmonar.

Los programas de rehabilitación cardíaca (PRC) efectuados tras el infarto agudo de miocardio (IAM) han demostrado su eficacia en cuanto al incremento en la capacidad funcional, el control de los factores de riesgo coronarios, la reducción de la sintomatología y la mejora del deterioro psicológico. Asimismo, hay evidencias de los beneficios en cuanto a su relación coste-eficacia.

Este tipo de programas se inicia en la fase hospitalaria, cuando el paciente se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos Cardiológicos a consecuencia de un infarto agudo de miocardio, de una cirugía u otro tipo de intervención, a fin de evitar los inconvenientes del reposos prolongado en cama, como son el descenso importante de la capacidad funcional por debilidad física, la aparición de complicaciones respiratorias y la prevención de la formación de tromboembolismos. En esta etapa inicial, los objetivos de los programas de rehabilitación cardíaca son: realizar movimientos para evitar las limitaciones de la movilidad que pueden provocar el dolor y la cicatrización de la herida durante los primeros días después de la intervención, así como eliminar secreciones bronquiales mediante técnicas de Fisioterapia Respiratoria, lo que ayuda también a tratar derrames pleurales o parálisis frénicas.

En la fase ambulatoria, de convalecencia, cuando el paciente cuenta con el alta hospitalaria y ha realizado una prueba de esfuerzo precoz (PEp), los programas de rehabilitación cardíaca permiten recuperar o mejorar la capacidad funcional de la persona, mejorar los niveles de fuerza, promover los cambios en el estilo de vida, educarlo sobre su enfermedad y sus cuidados, concientizarlo sobre la importancia de los beneficios del ejercicio físico, como así también la adherencia a los programas.

La tercera fase es la de mantenimiento, en la que el paciente debe mantener los nuevos hábitos que ha adquirido para evitar la aparición de otro evento cardiaco. El paciente estable puede continuar con su rehabilitación por cuenta propia, siguiendo las pautas aprendidas y siempre bajo supervisión de médicos y fisioterapeutas.

La Fisioterapia te da el aire que necesitas